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dimecres, 14 de novembre del 2012

La obra de Marc Bloch manipulada


Par Suzette Bloch, periodista, nieta de Marc Bloch.

Diversos intelectuales e historiadores aprobaron este texto, entre ellos:
Roger Grenier, Dominica Kalifa, Jacques Le Goff, Gérard Noiriel, Antoine Prost, Benjamin Stora, Nicolas Offenstad, Sylvie Aprile, Maurice Aymard, William Blanc, André Burguière, Bernard Chambre, Christophe Charle, Sonia Combe, Christian Delacroix, Olivar Dumoulin, Patrick Garcia, Pascal Jeanne, Isabel Lalou, Christophe Maneuvrier, Massimo Mastrogregori, Vincent Milliot, José Morsel, Didier Panfili, Peter Schöttler, François-Olivar Touati, Pedro Toubert, Sophie Wahnich.

La lectura de Fígaro Historia número 4, puso mi cabello de punta. Se pone al gran historiador Marc Bloch, que pagó de su vida su compromiso en la resistencia contra los nazis, en el mismo plano que al maurrasiano, pro mussoliniano y antisemita Jacques Bainville, miembro de Acción francesa, diario de la ultraderecha monárquica.



Eso no bastó. El último número de Fígaro Historia destaca de nuevo este paso de La Extraña Derrota [1] - libro póstumo que describe el desastre de 1940 - citado, recitado e incluso machacado en una versión truncada y salida de su contexto con el fin de poder archivar a Marc Bloch, en, dixit Le Figaro Historia, el “panteón de los fermentos de unidad nacional”. Ahí está frase: “Hay dos tipos de franceses que no comprenderán nunca la historia de Francia: los que se niegan a vibrar ante el recuerdo de la consagración de Reims; los que leen sin emoción el relato de la fiesta de la Federación.” Esta frase, sin embargo tiene otro sentido si la incluimos en el parágrafo  completo. Marc Bloch evocaba el Frente Popular de 1936 y criticaba el egoísmo de la patronal y de las élites y su incapacidad para entender el impulso de las luchas obreras. Veamos qué dice el inicio del parágrafo: “Sobre todo, cualquiera que hayan podido ser las faltas de los jefes, había en este impulso de las masas hacia la esperanza de un mundo más justo, ante cuya honestidad emocionante es asombroso que ningún corazón bien colocado haya podido seguir siendo insensible. Pero, cuántos patrones, entre los que he conocido, encontré capaces, por ejemplo, de comprender lo que una huelga de solidaridad, incluso poco razonable, tiene de nobleza: la cosa tiene un pase, dicen, si los huelguistas defienden sus propios salarios”.

Pero hay más y peor. He aquí lo que se puede aún leer con respecto a la Extraña Derrota : “Marc Bloch elabora un cuadro deslumbrante de las debilidades recurrentes de Francia: luchas de clases, élites separadas del pueblo, obreros más preocupados del espíritu de disfrute que del sacrificio…” un final de frase que no aparece en ninguna parte en el libro de Marc Bloch y que repite, en realidad, casi palabra por palabra el discurso de Philippe Pétain el 20 de junio de 1940: “Desde la victoria, el espíritu de disfrute triunfó sobre el espíritu de sacrificio.” Los autores de este dossier pretenden apropiarse la figura heroica de Marc Bloch acusando al mismo tiempo a la escuela de los Anales, fundada por este mismo Marc Bloch con Lucien Febvre, de todos los males. La entradilla de un artículo titulado “Vida y muerte del relato nacional” dice esto: “La enseñanza de la historia en la escuela tuvo por objeto durante mucho tiempo mantener el patriotismo de los jóvenes Franceses. La voluntad de traerlo a la objetividad bajo la influencia de la escuela de los Anales condujo paradójicamente a combinar la ignorancia con el comunitarismo.”

Yo habría podido menospreciar esta manera de hacer pero este número de Fígaro Historia va demasiado lejos. Siguiendo el hilo de sus páginas el conjunto de este dossier consagrado a “la verdad sobre la historia a la escuela”, declina tópicos nostálgicos, posiciones conservadoras, héroes viriles y belicosos del relato nacional, posiciones reaccionarias, destilando racismo y xenofobia, utilizando el testimonio de anónimos como si no estuviéramos en democracia. “Cabezas rubias, trata del Negros, madre maghrébine, el lugar del hombre europeo, la identidad francesa, la Francia cristiana”: estas palabras se arreglan en un discurso xenófobo apoyado por una iconografía orientada dónde se pueden ver colegiales puestos en contraste con reproducciones de libros de clase incriminados, una de las cuales con una estrella de David y la bandera norteamericana. En un expediente detallado publicado por el colectivo Aggiornamento histoire-geographie [2], unos historiadores analizan críticamente los distintos artículos del dossier de Le Figaro histoire.
Lanzo la alerta. Existe una tentativa repetida de quemar la democracia. No permitamos que el discurso de una determinada extrema derecha siga difundiéndose en el discurso público e invadiendo el campo intelectual al favor de las declaraciones que atronadoras de la derecha sin complejos  “pan con chocolate” [3].
Por un lado defensa de un retorno a la “historia-relato” bajo la forma de un gran relato nacional magnificado por los grandes héroes como Vercingétorix, Saint-Louis, Jeanne d’Arc ou… Pétain. Por otro, la ocupación de la mezquita de Poitiers por parte de miembros del Bloc identitaire : son dos facetas de una realidad alarmante. Hay que leer y releer Marc Bloch que, en sus escritos clandestinos, dibujaba el contorno de una reforma de la enseñanza : «Importa mucho más al futuro ciudadano francés hacerse una imagen correcta de las civilizaciones de la India o de China que conocer, […] la serie de medidas por las que el « Imperio autoritario » mutó, se dice, en « Imperio liberal». «El pasado lejano inspira el sentido y el respecto a las diferencias entre los hombres y al mismo tiempo, afina la sensibilidad ante la poesía de los destinos humanos», añade. «La historia es un esfuerzo hacia el mejor conocimiento », afirma además en la Apologie pour l’histoire ou métier d’historien [4].
(Traducción: Joan Tafalla, 13 noviembre 2012)

[1] BLOCH, Marc, La extraña derrota. Testimonio escrito en 1940, Barcelona, Crítica biblioteca de bolsillo, 2003. Traducción de Santiago Jordán Santiago.
[2] Véase el artículo: “Dossier Figaro Histoire : Lisez Marc Bloch au lieu de le manipuler !”, escrito por Charles Heimberg
[3] Referencia a una polémica lanzada por Jean-François Copé en relación a la supuesta noticia de que unos islamistas habrían robado el pan con chocolate de la merienda de un niño de la banlieue con el pretexto de que en ramadán no se debe merendar: http://www.lefigaro.fr/politique/2012/10/06/01002-20121006ARTFIG00370-jean-francois-cope-le-pain-au-chocolat-et-le-ramadan.php
[4] Existe traducción al español: BLOCH, Marc, Introducción a la historia”, México, Madrid, Buenos Aires, Breviarios del Fondo de Cultura Económica, 1988. Traducción de Pablo González Casanova y de Max Aub. Pirmera edición en francés: 1949, primera edición en español: 1952.